Reportaje en la prensa de la c. valenciana

EL REPORTAJE

'Nunca dejes de aprender'

M. G.

Massamagrell es la sede del Club Hapkido Valencia, o lo que es lo mismo, una escuela Mu-GIN (que se tra­duce literalmente por ‘nunca dejas de aprender’), una en­tidad nacida hace poco más de dos años de la que forman parte unas 140 personas, que van desde niños de cua­tro años a personas de 68, “es gratificante verlos a todos con la misma ilusión”, expli­ca Joaquín Valera, uno de los fundadores del club.

El hapkido es un arte mar­cial de defensa personal de reciente creación, data de los años cincuenta, cuyo objeti­vo es básicamente “evitar el enfrentamiento”. Proviene de Korea y es una especie de fu­sión entre el Aikido japonés y el Taekwondo koreano idea­do por Choi Yung Sul.

Valera explica cómo cono­ció esta técnica hace apenas diez años, después de dos dé­cadas practicando otro arte marcial, como es el Judo, “descubrí el Hapkido cuando mi maestro se jubiló y lo vi como un aliciente, como una continuidad y un comple­mento al judo.

Valera, cuarto de España por equipos con el combina­do de la Comunitat Valencia­na y tercero del mundo en categoría individual, explica que el club nace porque “ve­mos que hay un vacío en Va­lencia, y vemos que se va a producir un auge de interés por la defensa, que es lo que enseña el Hapkido, que como arte marcial enseña “coraje, respeto y honor”.

Este colectivo, con sedes en Massamagrell, Massalfas­sar y Almenara, ha organiza­do diversos cursos, algunos de ellos destinados a las mu­jeres para evitar agresiones, “el objetivo del Hapkido no es contrarrestar una agre­sión con otra, sino evitar el enfrentamiento, ya que una agresión puede agravar la si­tuación”, apunta Valera.

Para la práctica del Hap­kido, “no es necesario estar en una forma física espe­cial. Tan sólo hay que tener un poco de fondo, por lo que cualquiera puede practicar­lo”.

En cuanto a la práctica del Hapkido, existe la competi­ción pero como exhibición, “se trata de elaborar coreo­grafías”, explica Valera, quien añade que en Asia sí que exis­te la competición con comba­te, “pero al punto y no al KO, como en otros deportes.